Vamos a daros algunos consejos para que podáis minimizar todo lo posible el riesgo de sufrir estos molestos pinchazos.

Lo primero que debemos saber es que ponen sus huevos en zonas con agua estancada. Algunas especies necesitan muy poco volumen, siendo suficiente, por ejemplo, la que queda en los platos bajo los tiestos después de regar las plantas. En zonas como charcas, pantanos, riberas de los ríos y estanques es donde es más probable que nos piquen, sobre todo al atardecer.

Un dato curioso es que son las hembras las que pican, ya que necesitan sangre para alimentarse y completar su ciclo reproductivo.

La razón por la que son tan molestas sus picaduras es porque en el momento del pinchazo nos inoculan un anticoagulante que les facilita la succión. Nuestro sistema inmune reacciona y provoca esa reacción de picor, inflamación, enrojecimiento, incluso reacciones alérgicas en algunas personas. Todo esto se agrava con el rascado, ya que acabamos produciendo una herida que puede infectarse.



¿Cómo prevenir las picaduras de mosquitos?

Podemos prevenir las picaduras tomando algunas precauciones sencillas:

  •     No utilizar ropa oscura, de colores brillantes o estampada.
  •     No utilizar perfumes, lociones para el afeitado, cremas o jabones perfumados.
  •     Si tenemos las ventanas abiertas, no dejar la luz encendida y poner mosquiteras para evitar que entren en casa.
  •     Utilizar prendas ligeras que cubran los brazos y las piernas, en la medida de lo posible y, sobre todo, al atardecer.
  •     Informarse bien de las vacunas que debemos ponernos si vamos a desplazarnos a países tropicales.
  •     Utilizar repelentes sobre la piel y sobre la ropa, para una mayor protección.



Hay multitud de repelentes para insectos pero el que está reconocido como el más eficaz por la OMS es el DEET, presente en las marcas comerciales más conocidas (Relec, Goibi…), aunque no debe usarse en niños menores de 2 años. En estos casos es mejor usar los repelentes que contengan IR3535 o citriodiol, evitando aplicarlo en las manos por el riesgo que hay de que se las lleven a la boca.

Las pulseras podemos usarlas en zonas donde el riesgo de sufrir picaduras sea bajo o como complemento de un repelente tópico, ya que su efectividad es mucho menor.

Si a pesar de estos consejos te han picado los mosquitos, puedes usar productos que contengan amoniaco, que neutraliza los efectos de la toxina que inocula el mosquito.

Si observas que la inflamación es mayor de lo normal o que adquiere una tonalidad que haga sospechar que está infectada, debes acudir al Centro de Salud.

Espero que estos consejos os ayuden a manteneros a salvo de nuestros veraniegos enemigos.

¡Buen verano!