ACCIÓN Y DESCRIPCIÓN
MODO DE EMPLEO
Lavar y desinfectar la tetina antes de cada utilización y controlar su estado de desgaste o eventuales daños.
La tetina se debe lavar a mano. La limpieza en el lavavajillas no garantiza una higiene óptima y puede dañar el producto.
La desinfección puede llevarse a cabo en frío, mediante una solución esterilizante, en caliente (vapor) mediante aparatos apropiados o hirviendo.
Reemplazar la tetina en caso de desgaste evidente, desgarros y variaciones de la consistencia, de las dimensiones o del color. En todo caso se aconseja cambiar tras uno o dos meses de uso.
No sumergir la tetina en sustancias dulces o medicinales, ya que podrían favorecer la formación de caries.
Conservar siempre el producto en lugar limpio y seco.
PRECAUCIONES Y ADVERTENCIAS
La continua y prolongada succión de fluidos puede causa caries dentales. Los dientes del bebé podrían verse fácilmente atacados por las caries si la tetina del biberón se mantiene continuamente en la boca durante un tiempo prolongado o si se usa como chupete.
Inspeccionar la tetina antes de cada uso, tirando de su punta en todas las direcciones. Desecharla a las primeras señales de daño o rotura.
No dejar la tetina expuesta a la luz solar directa o cerca de fuentes de calor, y no dejarla en la solución esterilizante durante más tiempo del recomendado; la tetina podría dañarse y debilitarse. No calentar directamente al fuego, placa vitrocerámica, etc.
Nunca utilizar la tetina como un chupete.
Lavar la tetina inmediatamente después de su utilización.
Tetina de látex de caucho natural: puede provocar reacciones alérgicas en las personas particularmente sensibles.
Tetina de silicona: desecharla cuando empiezan a salir los primeros dientes, ya que podría rasgarse.
Comprobar siempre la temperatura del alimento antes de dárselo al niño.