Hasta ahora, todas las leches infantiles de fórmula se preparaban a partir de leche de vaca, pero ahora también podemos optar por las fabricadas a partir de leche de cabra. Esta puede ser una opción interesante para los detractores de la leche de vaca y para los bebés intolerantes a sus proteínas, que son entre un 2% y un 6%.

Capricare es la primera leche comercializada de éste tipo y tiene estudios clínicos realizados que garantizan el adecuado desarrollo de los bebés alimentados exclusivamente con su fórmula (https://bebeinnova.com/capricare/estudios/). También podemos señalar algunas ventajas como que no contiene aceite de palma, huevo, gluten, azúcares añadidos ni conservantes. Es una leche fácilmente digerible y, por tanto, adecuada tras la lactancia materna. Si quieres saber más, puedes consultar la página http://bebeinnova.com/capricare/.